Moderno local de tapas creativas y copas. Amplio bar-restaurante de copas, tapas elaboradas y cocina española con una decoración vintage industrial.
El sitio perfecto. Bueno para comer y bueno para beber. Fueras de carta en constante evolución. Personal increíble, sin excepción. También es el mejor sitio del barrio para ver fútbol. Difícil encontrar un local más completo y sin más pretensión que la de ofrecer una comida, una cena o un rato agradables.
Una excelente sorpresa! Me recomendó Google por cercanía al lugar donde estaba (como restaurante acogedor estilo industrial) y me ha gustado mucho. La atención maravillosa y todo lo que comí estaba riquísimo! Recomiendo!
Muy buen sitio para tapear. Todo lo que pedimos estaba muy muy bueno, pero sin duda recomendamos las gyozas. Las mejores que he probado. Todos los platos tenían mucho sabor. Sin duda volveremos!
Una gratisima sorpresa, buscando donde comer por la zona, dimos con La Escondida. Atención excelente, todo el equipo tanto de barra como se sala, educados y muy agradables. Comimos muy bien, platos bien elaborados y de buen tamaño. Recomendable al 100% Relación calidad/precio: excelente
Todo perfecto y muy bueno. Camareros muy amable. Totalmente recomendado. Nos pusimos hasta arriba de comer y beber y solob30€/PERSONA con copa.
Caro y escasas cantidades Fuimos ayer a este restaurante. Poca variedad de tapas, precios altos y cantidades muy escasas. Pedimos 4 tapas y a media tarde estábamos hambrientos. Ofrecían tapa de empanadillas y venía 1...ponedlo en singular entonces. 4 tapas, 3 cervezas y 2 vinos 31 euros, precio excesivo. Recogían todo rápido, e incluso se llevaron una salsa con la que no habíamos acabado. No volveremos, no tengo ninguna razón para hacerlo.
Fue una reunión de amigas e íbamos por menú, estuvo todo muy rico, bueno el Steam tartar no me convenció mucho pero el resto de cosas que entraban en el menú estaba muy bien. El postre nos disgusto un poquito porque ponía que era variado y no fue lo que pensábamos pero el resto bien.
Muy amables en la atención, llegamos sin reserva y nos buscaron una mesa, la ensaladilla rusa de curry es una mezcla que tuvo poco éxito, las patatas bravas algo mejor, las lagrimitas de pollo espectaculares, de hecho, repetimos. Huevos rotos normales y hamburguesitas también buenas, en cuanto a postre pedimos coulant para los niños y tarta queso y de nuevo la innovación no tuvo éxito la tarta de queso eran tres bolas de helado, bueno una de helado de violetas y dos de tarta de queso, se hacía muy pesado y no gustó. La atención siempre muy agradable.