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¡Muy recomendable! Platos / raciones completamente diferentes a otros lugares. Ideal para compartir y podré probar varias cosas Atención de 10. Te aconsejan y te explican plato por plato cómo está hecho y lo que contiene. Si las raciones o tapas están riquísimas, los postres ya es otro nivel. La tarta de queso...??. Es mejor reservar porque hay pocas mesas. Precio/ calidad excelente. Precio medio. Salimos muy contentos por la atención recibida y el trato que recibimos. Volveremos para probar más platos.
Totalmente recomendable. Servicio muy amable y agradable, comida deliciosa y de calidad y ambiente relajado. Pedimos el menú de 25 euros, todo un acierto. Volveremos, muchas gracias!
Un sitio muy recomendable, pruebas nuevos sabores y los platos están muy bien presentados. Tartar en su punto y calamares con huevo poche riquísimos,el brioche de torrija y la tarta tres quesos deliciosos.
Platos para compartir. Bién presentados, muy buenos y de ración generosa. Buén ambiente. Mejor ir sin prisas. Se toman su tiempo. Servicio cordial. Hay que reservar. La tarta de quesos con helado de higos de postre, espectacular. Para recomendar y repetir.
Muy recomendable! Probamos el menú y estaba todo riquísimo. Comida de calidad y muy bien presentada. El servicio muy atento, amable y profesional. Sin duda un sitio al que volveremos.
Restaurante situado en un barrio de Zaragoza, alta cocina de barrio. Menú de 20 euros, con dos entrantes, dos primeros,1 principal, bebida y postre (a elegir u entrante y un primero). Sabores sorprendentes. Si tuviera que poner alguna pega, sería la cantidad un poco justa si eres de comer más abundante, pero como menú degustación sabes a lo que te atienes.
He ido varias veces y siempre vuelvo; varias, a comer raciones y tapas, muy personalizadas y elaboradas. Hoy, menú del día, tan personal y dedicado como las raciones. Huevo poché de entrante, con migas; falso arroz con membrillo, salmón y pastel de chocolate belga de postre. El ambiente, tranquilo y amigable en un espacio no muy grande y confortable, para que la atención sea perfecta, tal y como resulta. Pocos vinos pero los adecuados, para acertar sin pensar ni gastar en exceso. La tarta de queso... ay la tarta de queso... Ha corrido la voz y el Bistrónomo se está convirtiendo en un lugar de referencia. Al margen, no entiendo cómo se ponen reseñas en las que se dice que la comida es perfecta, el ambiente también y luego se puntúa con 4 stars...
Un restaurante de 10. En el barrio de San José, un lugar bien ambientado, tranquilo, pocas mesas. El servicio extraordinario. Te explican la carta y te hacen recomendaciones. Platos sorprendentes. Sabores, elaboraciones y presentación de nivel.