Disfrutar

Como era de esperar una experiencia, desde que entras por la puerta. Siguen con el mismo entusiasmo, ilusión y atención que cuando empezaron. La fama y el éxito solo han hecho que elevar su nivel de excelencia a máximos. La comida increíble, hay platos que son auténticas joyas, por su puesta en escena, la composición del plato, los ingredientes utilizados… La propuesta de menú es súper variada, abarcando infinidad de técnicas o ingredientes que van desde la más pura sencillez convertida en exquisitez. El servicio un 10.

Lo recomiendo! Es una experiencia muy muy chula. Cenamos en la sala que hay abajo que es solo para 7 personas, en la mesa de la cocina. Estuvimos 5 h pero se nos pasó volando y fué maravilloso. Hay platos que sorprenden mucho, hacía tiempo que un plato no me emocionaba tanto. El personal es muy amable! El broche final es alucinante!! Merece mucho la pena.

Estupenda experiencia! Desde el primer contacto en la entrada del restaurante el equipo y personal del local se vuelca contigo con una atención estupenda. Haces un pequeño tour donde te van indicando las diferentes zonas de y el equipo. El menú que elegimos nosotros fue el Clásico, una maravilla. La combinación de sabor, texturas y diseño es increíble! Muy recomendable para alguna experiencia única. Michas gracias de nuevo al equipo, cocineros y camareros por su trato y atención ☺️

Siempre que se va a un restaurante de este nivel las expectativas que se tienen son altas pero en este caso siempre te vas a quedar corto, te va a sorprender y mucho. Desde que entras te sientes como en casa, por la disposición del propio local pasas “hasta la cocina” donde puedes ver cómo se preparar las elaboraciones y conocer a los chefs. Una vez en la mesa se despliega toda la magia. Todo es como una coreografía perfectamente equilibrada en la que los tiempos están medidos al milímetro. No hay que olvidar que son casi cuatro horas de experiencia gastronómica en la que en todo momento el servicio realiza justo lo que esperas. La atención es un lujo, cercana pero con una profesionalidad excepcional. Respecto al menú no hay ninguna, ni mínima, pega. Son elaboraciones al máximo nivel, un despliegue técnico y de sabor que alcanza cotas difícilmente superables. Es un menú diseñado en conjunto en el que los platos se suceden con absoluta naturalidad, como un guion redondo. Se nota que nada pasa por casualidad, todo está siempre “bajo control”. Destacar que mantener un ritmo tan perfecto durante cuatro horas requiere una coordinación impecable entre la cocina y el servicio de sala. Si se pasa por Barcelona es uno de los lugares a no perderse si eres un apasionado de la gastronomía.

Una gran experiencia en todos los sentidos. Personal atento en todo momento. Probamos el menú CLASSIC. Todos los platos espectaculares, no sabría resaltar a cual mejor. Increíble su pan chino relleno con caviar de beluga y sus macarrones a la carbonara. Volveremos y con ganas de probar el menú FESTIVAL.

Hace tiempo que quería ir, y por fin lo conseguí. La experiencia ha sido maravillosa. No puedo poner ninguna pega. Todo ha sido perfecto, desde la comida, preparación, atención, detalles, ...de diez, incluido el trato del servicio por parte de todos, y en especial de Eric GRACIAS por hacerme Disfrutar

Comida: cocina fusión conservando sabores tradicionales. Pocos platos por debajo del notable en el menú "classic": técnica exquisita, buena presentación y mucho sabor. Vino: hemos probado un "zilliken rausch kabinett 2020", muy bueno. Servicio: buen servicio. Mención especial para Ainoa, nos ha atendido con mucha amabilidad y ha estado muy atenta ante cualquier impedimento. Espacio: lamentablemente, se lleva la peor valoración. Ha empañado un poco la experiencia y te deja con un sabor agridulce. Local muy pequeño, con demasiado movimiento de personal entre mesas y muy ruidoso (hasta el punto de tener que pedir por favor, si nos podían repetir la presentación de varios platos ya que no escuchábamos la explicación con claridad). Considero que un restaurante de este nivel necesita un espacio a la altura, y este no lo está. Para alguien que valore la intimidad y tranquilidad, necesitan dar un salto de calidad. Gracias disfrutar, ha sido una experiencia especial :)

Uno de los mejores restaurantes de Barcelona y según los expertos, del mundo. Realmente es una experiencia que vale la pena, especialmente si la gastronomía mediterránea no es algo a lo que estás acostumbrado vas a alucinar con los sabores. Y si lo es, también porque las presentaciones, las texturas, los trampantojos y el servicio son de otra galaxia. Además, yo no soy un experto pero el nivel de bebidas es muy destacable en calidad y variedad así que creo que es buena idea acompañar con un maridaje (con o sin alcohol). Por si te queda la duda, además la cantidad es abundante así que no saldrás con hambre precisamente :)