Restaurante chic de comida india y cántabra. Restaurante fino con comedor cálido en el que se sirven platos indios y cantábricos, y menús de degustación.
El servicio no pudo ser más atento y excelente. La comida, de lo poco que nuestros estómagos pudieron abarcar esa noche, fue increíblemente excelente. El pollo tandoori es el más jugoso que he probado nunca en Madrid. Una pena estar llenos y no poder probar la tarta de queso… pero para eso habrá que volver.
Restaurante curioso con una decoración muy lograda y que ofrece platos fusión de cocina cántabra e india, aparte de puramente india. Destaco la lasaña y la increíble tarta de queso, con un sabor fuerte a la par que logrado, tanto en textura como en punto de dulzor. La experiencia ha sido muy buena. Eso sí, no es barato. Sistema de reserva sencillo y buen trato.
Un restaurante muy muy interesante de comida fusión entre hindú-“cántabro” que está muy rico. La decoración del local es espectacular, muy bonita y con mucho gusto. La comida es de calidad aunque en mi opinión la relación calidad-pecio no es la mejor. Los platos no son muy contundentes y para comer bien acabas pidiendo bastante. Igualmente lo recomiendo ya que merece la pena probar sus diferentes platos y la atención es muy buena.
Sitio precioso , acogedor y tranquilo.La atención excelente,pendientes en todo momento de todo.La comida excepcional ,rica y sabrosa. Los dados de merluza y la lasaña nos sorprendieron muy gratamente,las croquetas también buenísimas.El rodaballo estaba muy rico,aunque un poco pasado para nuestro gusto. La torrija estaba tremenda y la tarta de queso ,sin palabras....Indispensable para los amantes de esta tarta Deseando volver. Gracias.
Fuimos con reserva a probar el menú degustación y fue todo un acierto. La comida muy rica (sobre todo las rabas, merluza y croquetas), servicio rápido y correcto. El vino blanco semidulce que pedimos también muy bueno. Recomiendo ir sin haber merendado, pues las cantidades para cada plato son correctas pero uno se va llenando y lo quiere probar todo. Aún así, no ha sido un menú degustación que me haya saturado pero sí que acabarás lleno. La decoración del restaurante es muy original y el ambiente cálido y acogedor. Como pega, me extrañó mucho que no tuvieran de infusión un poleo-menta, tuve que tomar manzanilla en su lugar. No descarto el volver para probar otros platos de la carta en futuras ocasiones.
Estuvimos ayer comiendo. El sitio es muy bonito, la decoración es espectacular pero la comida no acompaña. Pedimos el menú ejecutivo y las rabas estaban muy duras y la merluza del segundo nos llegó muy fría. A pesar de tratarse de dos menús nos trajeron 1 postre a compartir con un plato y dos cucharas. La presentación muy buena y los camareros muy atentos, por eso le pongo dos estrellas. La verdad no sé si volveremos, hay mejores indios en Madrid por ese precio.
Sorprendente. El sitio es muy bonito y la comida es excelente. Una fusión de comida cántabra con india. Todos los platos que probamos estaban deliciosos desde el pan naan hasta los postres. Especial mención tiene la tarta de queso, con un sabor a queso picón maravilloso, una de las mejores tartas de queso que he probado, sin duda. Repetiremos.
Restaurante decorado con muy buen gusto, ambiente agradable, y personal muy atento y correcto. Es un restaurante Cántabro con fusión hindú, aunque los platos tienden más a la comida hindú, predominan las especias, en general la comida está muy bien elaborada, con una presentación muy trabajada, y en líneas generales buena. En mi opinión hay que probarlo.