Restaurante chic con platos exclusivos. Platos sofisticados con ingredientes locales servidos en un restaurante refinado.
Comer como un rey en un antiguo palacio es posible! Este restaurante me ha parecido aparte de elegante, encantador por toda la historia que tiene detrás y es que al ser un antiguo palacio, esta decorado y ambientado a ese estilo. La comida ha estado excelente y sin duda alguna he probado una de las mejores paellas en este sitio y un dato muy interesante es que puedes tener acceso a su terraza, haciendo una reserva previa. (La terraza tiene una vista increíble de Barcelona)
Estupendo restaurante, totalmente recomendable. Ambiente tranquilo y platos muy buenos. Recomendaría todo lo que comimos, el lenguado, el bacalao, el cordero, los langostinos rebozados, el carpacio... Las migas espectaculares. Y el postre de pastel de manzana una delicia. Tener además la oportunidad de tomar el café en la terraza de arriba un lujo.
En medio de la calle más caótica, turística y transitada de Barcelona se encuentra una isla de paz. Son ya algunos locales que ofrecen esta tranquilidad, pero este en concreto me encantó por su buena imagen que presenta todo el local, se accede a través del hall del hotel 1889 y da directamente a Las Ramblas en su primer piso. Más allá del local su comida destaca en algunos platos que son una veritable delicatessen por un precio muy asequible, destacando en especial el arroz negro. Algunos de sus platos son mejorables como su ceviche, que carece de personalidad alguna, habiendo perdido su enfoque tradicional y a la vez sin incorporar nada interesante a sus sabores. Aún así la experiencia es de un 10 y sin dudar alguna volveré al local. Forma parte del restaurante del hotel pero están totalmente abiertos a clientes externos.
Un hallazgo sensacional para el día de Navidad. Ubicado en la primera planta del Hotel 1898 en plena Rambla de les Flors de Barcelona. El menú navideño compuesto de varios primeros, segundos y postres todos ellos exquisitos deliciosos y con una muy buena presentación y producto de primerísima calidad, diseñado para los gustos más dispares. La bodega en la misma línea que la comida es decir de inmejorable calidad todo ello completado con una atención por parte de las personas que nos atendieron digna de elogios y agradecidos por hacernos vivir una experiencia perfecta. Decir que para redondear el éxito nos invitaron en el Hall del Hotel para disfrutar de música en vivo y un cóctel ofrecido como complemento del ya extenso y rico menú Felices y contentos con ganas de repetir al 100 x 100
Sitio fantástico con un aire muy clásico y conservador. Comida riquísima, de calidad, aunque la carta tiene pocos platos. El postre me encantó. Servicio exquisito, impecable, rápido y amabilísimo. Hoy en día es de agradecer. Precios tirando a carillos incluso con el descuento que puedes encontrar en algunas aplicaciones como eltenedor. Un caso aparte son las bebidas....muy caras. Un agua de 50ml 4€ o una coca cola enana de 20ml 5€ me parece un poco abusivo. Lástima además que cuando estuvimos había un grupo muy numeroso de turistas muy pero que muy ruidosos. Pero como nota general le doy un sobresaliente. Gracias!
Ambiente muy bueno, platos espectaculares y zona perfecta para visitar Barcelona o ir de shopping y parar a comer o cenar algo en mitad de la rambla.
Un oasis de tranquilidad en plena Ramblas. Restaurante del hotel 1898 situado en la primera planta del hotel. Ambiente relajado y elegante, servicio profesional, discreto y amable. La comida muy bien, buena materia prima y bien resuelta. Muy recomendable.
Lugar privilegiado y de diseño colonial ya que hace honor a su nombre! Albergaba la central de comercio tabaquero de filipinas! La cocina está a la altura ya que el género es de primera calidad debido a la cercanía del mercado de la boqueria! Para acabar de rematar la terraza rooftop es una de las más codiciadas de la ciudad con buena vista y sobre todo mesas amplias y sillones tipo sofás muy confortables!