Frida Restaurante Zaragoza

Teníamos mesa reservada, llegué con móvil sin batería y al pedir enchufe, enseguida nos asignaron otra mesa con un enchufe al lado. Trato bueno.Farina nos atendió muy bien Nos gusto lo elegido y parte que nos habían recomendado. No pudimos ya llegar al postre. En otra ocasión. El vino que elegimos, ya conocido por nosotros, buen precio. Recomendable, volveremos, además tiene terraza

Estuvimos de maravilla. La comida muy rica. Estuvimos cenando un sábado noche… tienen una grata sorpresa para los clientes….. Lo único negativo sin serlo es que parecía que tenían mucha prisa por retirar platos… Repetiremos seguro.

Decidimos probar su terraza que aunke el día era frío está bien acondicionada con varias estufas. Nos lo habían recomendado y no defraudó. Compartimos varios platos, su fusión mediterranea con otras culturas hace k te traslades a otros confines. Cocina elaborada, buen servicio ágil y atento , con buenos precios sin ser barato pero acorde con la zona. Repetiremos sin duda.

El personal fue muy correcto salvo en el escueto comentario de uno de ellos....ya que si nos fijamos en la fuente de patatas "caseras" no es el color del resto de fotos publicadas por otros usuarios. Le preguntamos al camarero qué llevaban las patatas al verlas tan oscuras y nos contestó: "¡ Sal !"....?.... estaba claro qué las patatas se frieron en aceite sucio y si realmente las patatas eran caseras son muy diferentes a las caseras que yo suelo comer. La presentación de los platos correcta.

Restaurante muy bueno. Carta muy completa, con producto de calidad y bien cocinado. Destacar el servicio, rápidos atentos y muy profesionales, sobretodo de Juan que con sus sugerencias y buen trato hace disfrutar de la experiencia. Para volver!

Nos recomendaron este local y no nos ha defraudado. Trato muy atento y precio muy razonable. La tarta de queso casera nos ha gustado mucho pero es que todo lo anterior también. Recomendable

Reservé para cenar hace unos días por una ocasión especial. El servicio fue muy atento con nosotros, resolviendo las dudas sobre algunos platos de la carta y presentándolos al traerlos a la mesa. La carta es extensa y muy variada. En nuestro caso decidimos apostar por compartirlo todo y poder degustar los platos elegidos poniéndolos en común. Pedimos tres entrantes y dos platos principales. Las raciones son adecuadas, no te quedas con hambre y aunque estábamos saciados nos pareció un sacrilegio irnos sin degustar alguno de los postres. La atención del personal fue exquisita e hicieron muy agradable la velada. Por otro lado el local es muy bonito y acogedor, a la par que elegante. Un nuevo rincón favorito en Zaragoza, volveremos pronto.

Pasamos frío. Ese sería el titular. Creo que la puerta que tienen no estaba diseñada para estos fríos o quizá necesiten un sistema de climatización mejor. Esta mala sensación nos hizo desear irnos rápidamente y no llegamos a disfrutar al cien por cien la experiencia. La comida estaba muy buena, exceptuando el tartar que para nuestro gusto estaba demasiado especiado. Cantidades muy aceptables, precios acordes a esta zona de Zaragoza. Atención correcta y amable. Seguramente vuelva en verano a probar los platos que me quedé con ganas de probar.