Fuego Las Palmas

Un menú muy elaborado con platos de sabores fuertes y muy ricos. Eché de menos el sabor de la esencia de algunos platos, de la materia prima base, que queda camuflada con otros sabores fuertes. El pulpo exquisito, los ravioli con un sabor intenso delicioso, las gambas ricas y en su punto. Demasiada mezcla de sabores fuertes en las albóndigas y la burger que aún así estaban buenas pero para mí no llega al nivel que puedes esperar de un restaurante así. En general muy rico y merece la pena probarlo, buena experiencia. No sé si para repetir.

Muy grata sorpresa!Reservamos por casualidad y nos ha sorprendido!100% repetible y aconsejable!Menú degustación con botella de vino por 135€. Un menú degustación del que sales muy satisfecho. Comida genial y atención inmejorable.

Magnífica experiencia gastronómica con amplitud de sabores. La carta no es muy extensa pero todo lo que probé estaba de 10, recomendaría a día de hoy ir a la carta salvo que hagan algún cambio futuro en el menú degustación. No apto para todos los bolsillos pero un acierto si lo eliges. Tanto la reserva como la atención recibida fue del todo correcta. Sin duda con sitios como éste la ciudad está dando un salto de calidad

Muy buena calidad en los platos y presentación!! Pedimos las croquetas, las albondigas de choco y el cochinillo. Todo estaba riquisimo y de sabor intenso. El lugar está muy bien decorado y es muy confortable. Me faltó una mejor carta de cervezas

Un auténtico descubrimiento. Vinimos por el hecho de que por valoración, diseño del local, reseñas y menú parecía ser un restaurante para celebrar un día especial. Y teniendo en cuenta que nos encanta descubrir sitios nuevos en la isla, no solo cumplió con las expectativas, sino que las superó con creces. Puedo decir sin duda que es uno de los restaurantes que es obligado probar en Gran Canaria. Llegamos con la intención de ir a la carta, pero nos recomendaron el menú degustación y por el precio y cantidad, pinta y variedad de platos hicimos caso a la sugerencia. No nos equivocamos. Sabores únicos, de restaurante de primer nivel y con platos con enorme variedad. Me es muy difícil decantarme por uno, pero totalmente imposible desmerecer alguno de ellos. Todos sorprenden por la variedad de sabores en cada bocado. No obstante, recomendar especialmente los canelones, la ventresca y los huevos de gallina. Por último, destacar una atención y servicio exquisitos en un local muy acogedor. Antes de salir del local ya estábamos recomendándoselo a nuestros amigos. Volveremos.

Acojedor lugar, buen servicio. Pero lo importante que es la comida, hemos disfrutado muchísimo , pedimos el menú degustación y no tiene ninguna pega, al contrario, sabores e ideas especatulares. Se podría destacar cada quno de los platos pero el postre de bienmesabe, scramble de gofio y plátano macerado es una cosa de locos. Un postre que debería de ser bandera de nuestra gastronomía. Tenemos mucha suerte y debemos aprovechar que por las circunstancias estemos disfrutamdo de profesionales que vuelven a su tierra y nos traen todos sus experiencia y conocimientos. Estamos llevando a Gran Canaria a otro nivel gastronómico y eso es muy de agradecer.

Este restaurante se suma a la tendencia de restaurantes que apuestan fuerte por subir el nivel de la isla. ¡¡Y lo consigue con creces!! Yo creo que de hecho ahora mismo podría apuntar a ponerse en las primeras posiciones de la ciudad. Probamos el pulpo con espuma de mar que, efectivamente, te trasporta en cada bocado a la orilla de la playa. Las croquetas de rascacio (cabracho) y langostinos que son una bomba de sabor. Los ravioles de rabo y foie con setas shiitake que, literalmente, nos enamoraron y son uno de nuestros platos favoritísimos. Y la costilla a baja temperatura con una salsa cantonesa que se deshace en la boca y esta para morirse del gusto. Además, el pan y el aperitivo (una especie de mousse de alioli) también están de vicio. Y el servicio es espectacular. Atento, amable y muy, muy cuidadoso. Es tan fantástico como la comida. Por último, la relación calidad-precio nos pareció más que correcta para la calidad de la comida y el servicio. En resumen, uno de los mejores rincones para disfrutar de buena gastronomía en un entorno muy agradable en Las Palmas. 100% recomendable.

Desde la entrada, nos llamó la atención la cuidada decoración del restaurante y la carta invitaba a probar ciertos platos que parecían tener buena pinta. Una vez dentro, el trato fue excelente, nos dejamos llevar por las sugerencias y pedimos varios entrantes, los cuales nos sorprendieron por sus sabores ricos y frescos, pero lo mejor sin duda del restaurante fue la carne, el solomillo con langostinos nos encantó y el lomo alto estaban en su punto con un sabor de la carne exquisito. Por otro lado, pedimos varios postres para compartir, nos gustó mucho la espuma de limón y uno que llevaba crema inglesa con frutos rojos. La carta de vinos, otra grata sorpresa del local. Sin duda volveremos de nuevo al local.