GastroBar Pasión

Un pequeño bar con mesas altas en el interior y terraza exterior, tiene una buena barra de tapas con buen producto y rica elaboración. El camarero que nos atendió en la mesa muy atento con buen servicio. Recomendable

PEQUEÑO BAR, PERO QUE EN LA COCINA MIMAN EL PRODUCTO, PINCHOS BUENOS Y RACIONES GENEROSAS Y DE CALIDAD. LOS CHIPIS MUY RICOS Y LA TARTA DE QUESO BUENA Y DE DULZOR EN SU PUNTO. SI QUIERES DISFRUTARLO RESERVA MESA. EL EQUIPO MUY BIEN, ATENTOS Y SIN DEMORAS

Pasión es su mejor nombre. La cocina es exquisita, no hay nada que salga de ahí que no quieras repetir. Chipirones, ensaladas, chuleton, albóndigas, bacalao, rabo, raciones y sus singulares y riquísima tapas. Como si fuera poco, la atención es sin igual, muy familiares. Busco cada excusa para comer o cenar allí. Reservar es la mejor opción por las pocas mesas en su interior, también cuentan con mesas en el exterior; pero tiene mucha demanda.

Uno de los mejores sitios de Valladolid para comer y tomar pintxos, trato de los camareros excepcional, volveremos seguro! Gracias por todo! Muy recomendable!

Comida buena, no hay carta como tal, lo tienen divido en pinchos y raciones. Es mejor reservar ya que el lugar es pequeño y tiene pocas mesas, de las cuales la mayor parte están en terraza. La camarera muy amable. Quedamos saciados. Volveremos!

Hemos tenido mucha suerte al llegar a este lugar. Tienen unos pinchos y unas raciones estupendas. Venimos de Sevilla y nos ha atendido Laura, una chica muy simpática y amable. Si volvemos a Valladolid, volveremos aquí.

Muy buena experiencia en este bar-restaurante junto a la Plaza Mayor de Valladolid. Comida riquísima y una atención de 10. Tienen una llamativa barra de pintxos inspirada en Euskadi (la enorme foto de Donosti que tienen en la pared les delata) y también raciones para pedir a la carta: son famosos sus chipirones (buenísimos), también pedimos callos y ragú de rabo con setas. Estupendo todo. Precios también muy competitivos, salimos a 15€ por persona con varias copas de vino y cervezas incluidas. Volveremos, seguro. :)

Este lugar era antes era patas de Blas y ahora es un gastrobar de lo mejorcito que he visto.Me lo recomendó un amigo y la verdad es que el sitio es estupendo, solo tiene el problema , y es que es pequeño.El chuletón le pusieron al punto y los chipirones estaban riquísimos.