-
Acudimos a comer con reserva. El local es pequeño así que me parece imprescindible hacerla. El local a pesar de ser pequeño no resulta agobiante, de decoración acogedora y personal. La carta es muy amplia. La camarera que nos atendió fue muy amable y nos recomendó varios platos. La presentación de todos ellos era esmerada, el sabor exquisito y la cantidad abundante. Tras el postre (también buenísimo),la camarera nos regaló un bizcocho típico de Pascua (ya que acudimos sobre esa fecha), no nos gustó mucho pero fue un detalle muy bonito. Recomiendo probarlo, nosotros volveremos seguro!
Una pequeña joya en el centro de Bilbao. Comida hecha con cariño, artesana y siempre original e innovando. La atención recibida exquisita, y el ambiente muy familiar e internacional. Ha sido una experiencia gastronómica y pensamos repetir. Muchas gracias por una cena maravillosa!
Hay que reservar ya que el local es pequeño. El servicio es muy agradable y rápido. Las raciones son abundantes y bien de precio. Nosotras pedimos las croquetas de calabacín, la ensaladilla de berenjena ahumada, pitogiros y kotosuvlaki. Todo muy rico. Sale a unos 12/13€ por persona con bebida, algo para compartir, plato principal y postre. Para repetir y probar más platos.
Un trato excelente. Camareros agradables, simpaticos, cercanos y muy atentos con todo. La comida excelente. Sabores muy potentes. Precios muy asequibles, lo que es muy bueno para poder probar muchas cosas. 100% recomendable. Repetiremos seguro
Fui a comer con unos amigos (7 personas). El sitio es pequeñito y acogedor pero dentro estábamos 2 grupos de unas 7 personas casa uno y no nos molestamos para nada. El camarero alguien muy atento y simpático que ademas nos amenizo la espera con unos acertijos. La comida riquísima, todos coincidimos en que las brochetas de cerdo y los girapitos estaban espectaculares. Para poner la guinda, el precio es muy barato, para lo que comimos, salimos a menos de 15€ persona lo cual esta muy bien! Yo lo recomiendo totalmente y sin duda volveré
Restaurante de cocina griega casera. Los platos, a cada cual más rico, contundentes en cantidad, y además a precios más que asequibles. Por el toque que le dan, sorprende hasta una sencilla brocheta de pollo. El plato del día era tomates rellenos de arroz, buenísimos. Aconsejo reserva, sobre todo en fin de semana, porque el local no es muy grande y está muy solicitado. Desde luego repetiremos, ha sido una gozada.
Un lugar pequeño pero acogedor, con la posibilidad de hacer pedidos. El personal que nos atendió muy simpático y agradable en todo momento, recomendándonos algunos platos. Fuimos a cenar y pedimos una ensalada y dos platos principales los cuales estaban muy ricos y tenían un precio muy comedido. Sin olvidar sus abundantes raciones. Seguro que repetiremos.
¡INCREÍBLE! Me puse a leer las reseñas y al ver tan buenas recomendaciones decidamos ir...tengo que decir que supero todas nuestras expectativas? Un rinconcito ideal, la atención inmejorable y la comida deliciosa 10 de 10. Si estás o sois de Bilbao no pierdan la oportunidad de ir porque los va a sorprender. Para mí se ha convertido en uno de mis sitios para repetir siempre. Muchas gracias y seguir así!