Llantén

Recomendable para comer un grupo grande. Cuenta con un espacio increíble que te permite disfrutar del buen tiempo y una carta amplia y variada. Es un buen sitio para ir con niños. El personal es super atento y la atención personalizada y rápida. En nuestro caso pedimos varios platos para compartir, destacando el pescado de roca y el salmorejo. De postre sin duda la tarta de queso fue nuestro favorito. La calidad precio es muy buena y no te quedas con hambre al pedir un plato. Es algo más caro que los locales cercanos pero merece mucho la pena. 100% recomendable

Un restaurante que, por improvisado, me ha parecido fascinante. Buen vino y buenas copas, un embutido de vaca de calidad top y un borriquete (pescado que desconocía) de Rota para la memoria. Lo incluyo en mi lista de favoritos y en la Dónde ir cuando voy a…

Estupendo el ambiente en el jardín haciendo aún bueno en Octubre. La comida tenía toda buena pinta, nosotros pedimos los 3 arroces con los que cuenta la carta: almejas, rape y langostinos y el de lechazo en paella los tres y dan para más de uno si vais dos y pedís otros entrantes. La otra foto es del ceviche de corvina, original con los chips de plátano pero se me quedó corto de sabor. En cambio los postres ni foto hice, estaban buenísimos: helado de queso, tarta de manzana y tocinillo de cielo. Muy recomendable tanto para eventos como para celebraciones familiares

Comida Rica, con muy buena calidad y muy bien cocinada. Muy ricas las carnes, el solomillo por ejemplo, en su punto perfecto. Los arroces en su punto también, y perfecto si de cantidad. Postes caseros exquisitos como el tocino de cielo o las tartas de manzanas o de queso. Servicio muy atento y amable. Por decir un pero, carta algo limitada y si no estás en temporada, los veganos lo tienen algo complicado. Muy atentos también a las intolerancias y alergias. Y para acabar, sitio ideal para estar tranquilo en su jardín si hace buen tiempo, que es un plus. Sitio recomendable pero no económico tampoco.

Espacio acogedor y con jardín para verano de lujo. A 30 minutos en autobús del centro de Valladolid. Trato excelente, carta breve pero sugerente, nula opción para ajenos a proteína animal. El chicharro a la brasa estupendo, regado de un aceite con “sabor” (limón, perejil, ?…). Y el ceviche de corvina con plátano frito muy resultón. RCP un poco alta, aunque se acepta por lo agradable del espacio y la seguridad de materia prima de calidad. Se nos hará fácil volver.

Le doy 3* por el ambiente, la terraza está muy chula en verano. El servicio fue muy muy lento, la calidad de la comida no es mala, pero el precio desorbitado para su ubicación.

Un lugar diferente en Valladolid. Tienen un patio muy chulo con una decoración de casa menorquina. La comida es exquisita, con gran variedad de platos. Me quedé encantado con el chicharro y el arroz de rape. Volveré sin ninguna duda. Lugar top!

Que decir de este sitio privilegiado, no puede ser más bonito ni se puede comer mejor. Simal nos hizo sentir en casa. Si quieres darte un homenaje o compartir una experiencia única no dudéis en subir a conocerlo. Un diez