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Una buena opción para comer o cenar en el centro de Málaga. Todo lo que comimos estaba correcto. El tamaño de los platos es normal, no es pequeño pero no te vas a llenar. De lo que probamos, ll mejor la ensaladilla y el atún, así como las natillas. La atención por parte de los camareros fue muy buena. En cuanto al local, porque no había mucha gente, pero hay demasiadas mesas y muy juntas entre sí. Cuando entramos notamos frío del aire acondicionado y lo solucionaron sin problema, pero al ir llegando más gente debieron de bajarlo porque empezó a hacer mucho frío. Lo mejor la música jazz de fondo. Nosotros fuimos con descuento de El Tenedor y la cuenta final se quedó muy bien, pero sin el descuento resulta un caro.
Pocos pros en este restaurante. Hemos ido con el descuento de El Tenedor y menos mal, porque la organización ha sido bastante desastrosa. Nos han traído dos tapas que pedimos al principio después de los platos principales. Pedimos tres hamburguesas con tres puntos de cocción distintos y al servirlas ni siquiera preguntaron. A una de las comensales le han traído la ensalada que no pidió en principio y con más de una hora de retraso. A otro comensal lo mismo con la carrillada en salsa (más de una hora en servirla). La calidad de la comida no estaba mal, pero tampoco era nada destacable por sabor ni por presentación. No lo recomendamos y no volveríamos a repetir, espero que esta reseña la tomen como una crítica constructiva y mejoren el servicio, puesto que ha sido bastante mejorable. No se puede tardar tanto en servir y menos aún traer las tapas a la hora del postre.
Muy buena experiencia en un local recién inaugurado en la plaza de la Merced. El trato de los camareros ha sido muy bueno, en especial por parte de Fran, la cocina espectacular y el ambiente muy agradable. Para el tipo de locales que hay en la zona recomiendo sin duda probar el restaurante. Calidad-precio muy buena. ¡Volveremos!
Fue un poco decepcionante. Era el primer sitio al que fuimos a comer cuando llegamos a Málaga y la verdad que esperábamos más. Pedimos tapas de croquetas, gambas al ajillo, tataki de atún y carrilera. Comida muy normal y muy escasa, no podría destacar nada. En cuanto al precio, porque teníamos un descuento del 50%, si no me habría parecido un robo.
Restaurante que sorprenderá, calidad precio estupenda, adjunto fotos, pero no hacen justicia. Probamos la tapa de ensaladilla, muy buena y casera, la Berengena con miel expectaculares ( de hecho pedimos una 2 ración) y tapita de callos a la malagueña y unas puntillitas con una fritura muy fina y producto de calidad por un precio bastante bueno y más estando en pleno centro de Málaga con un ambientazo tuvimos mucha suerte de encontrar una mesa. Aparte de la comida lis camareros muy simpáticos, agradable y atentos a la altura de los platos y el sitio también muy agradable la decoración, la música, iluminación. La verdad que tuvimos una velada familiar muy agradable.
Comimos de tapas. La comida es muy buena, la atención por parte de los camareros genial. Nosotros teníamos un descuento del 50%, pero sin descuento resultaría un poco caro en relación a la cantidad.
La comida está rica, casera. Quizas puede parecer poco, pero nosotros nos fuimos con el estómago lleno. A mi niño le encantaron las croquetas :) El trato del camarero fue genial. Volvería sin duda
El plato de setas estaba muy aceitoso. En el de secreto ibérico (13 euros) la carne estaba dura y no pudimos terminarlo pese a que lo intentamos. Baja relación calidad-precio, al menos en lo que pedimos. La atención muy buena.