Madre del Amor Hermoso

Único restaurante del entorno que nos atendió un martes para cenar a las 11 de la noche, después de preguntar en otros 4 restaurantes. Personal amable y con disposición. Terraza muy bonita, con los detalles cuidados y con vistas a la playa ? Relación calidad-precio buena (unos 15€ por persona pidiendo dos raciones para compartir).

Sitio bien ubicado y decorado. Amplio, servicio correcto. Los platos en líneas generales estaban bien, exceptuando el postre hojaldrado de manzana (lo tuvimos que dejar porque estaba soso). Pedimos dos vinos que estaban en la carta pero que no los tenían disponibles, y los aconsejados no fueron muy buenos. Sin embargo creo que por ambiente y los platos iniciales vale la pena darle otra oportunidad.

Recomendable ? Buen trato del personal, muy atentos y amables… A pesar de un percance que tuvimos que no quiero mencionar xq no se lo merecen y después de solventarlo nos fuimos con un buen sabor de boca. Cierto es que lo recomendaría puesto que la calidad de los alimentos es y la calidad es muy buena Nos comimos un arroz negro que estaba buenísimo y huevos rotos. El postre una torrija fermentada muy rica….pero nada como el arroz….rico….muy rico y bien hecho de condimentos y de punto. Yo es lo que recomendaría

Restaurante con encanto para comida o cena especial en el paseo de las Canteras. La comida estaba muy buena, todo lo que probamos nos gustó mucho, sobre todo los huevos escalfados con virutas de fua y trufa. El servicio fue muy atento y rápido. Los precios son medios-altos, pero para ocasiones especiales merece la pena.

Espectacular local en el paseo de Las Canteras. Dos veces he estado, y las dos me ha sorprendido el servicio, la calidad y el trato humano dado por el personal. Los platos de gran calidad, vino exquisito (matarromera) y postres de lujo. Un millón de gracias

Diseño y confort, perfecto para una cena romántica o con amigos. En plena avenida de Las Canteras, mantiene cierta tranquilidad, mientras te atienden y sirven de manera muy profesional y amable. La carta es bastante amplia, no nos equivocamos con nuestra elección y como no destacar el postre, fiel amante de las torrijas, esa estaba muy buena. Volveremos, eso seguro.

Segunda vez que visitamos este restaurante, está vez en pareja. Llegamos tarde para la hora del almuerzo, pero no tuvimos ningún problema. Nos pusieron una mesa muy buena y tanto la comida como la atención nos gustó mucho. Pedimos unos huevos rotos con gulas y gambas y un solomillo para compartir. Todo bien cocinado y la carne en el punto que pedimos. Volveremos

Es un restaurante que ofrece variedad de opciones, comer en familias o grupos de amigos, mesas amplias con decorado q te transporta a medio Oriente, comer en pareja pudiendo disfrutar de su gran variedad de carta fuera o dentro, si eliges fuera podrás disfrutar de la agradable presencia del mar, o, incluso comer solo/a puede ser una opción q será un autoregalo en sabores y sensaciones. Nuestros platos preferidos, el pescado del día, siempre fresco y con aroma a mar, o, cualquiera de sus la paellas, te quedas con ganas de repetir y para finalizar con un toque de dulzor, sus postres.