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Empezamos mal nada pedir las bebidas; tras preguntar y confirmar que tenian Bitter Kas, nos traen una botella de otra marca (Mare Rosso, 50 centimos el botellin), abierta y agarrado la boquilla con la palma de la mano. Le comenté al camarero que eso no era Bitter Kas, y que no sabía igual, y se marchó con un jocoso "indudablemente que no lo es" sin ofrecerme alternativa. Nos preguntaron si queriamos comer, y afirmamos. Tras ponernos los manteles de papel y un cestillo con 10 picos y 3 rebanadas de pan (literalmente), en la carta nos damos cuenta de los precios desorbitados, y ya atrapados con tener que pagar 1 euro por persona y servicio. Tras pedir una porra que no tenia precio (en carta), nos pusieron un plato aguado que mas parecia un gazpacho, con lo que podria ser 1/10 de un huevo picado y no llegaria a 5gr de jamon. Si Antequera viese eso los demandaria por apropiacion cultural y desvirtuación. 8 euritos. - 1 botellin de Bitter Kas falso (2.50€) - 1 lata de Coca-cola (1.80€) - 1/2 ensaladilla rusa (5.00€) - 1 plato de porra aguada (8.00€) Total: 18 euros y un hasta nunqui.
Los camareros muy agradables, el resto, todo lo demás, deja muchísimo que desear. La comida fría, se pide calentar y vuelve fría de nuevo, 1 hora y media para que te traigan 1 plato de comida, después calcula otros 20-30 minutos por cada plato que hayas pedido, por lo que cuando tú terminas de comer, tu compañero aún no tiene ni su plato. Llegamos a las 14:30, son las 16:20 ahora y calculo que hasta las 17:00 no nos iremos. Podría seguir, pero lo voy a dejar aqui.
Entramos y eramos 6, el camarero no mostró interés en acomodarnos (ya que las mesas estaban preparadas para 4). Pedimos el desayuno y aunque lo apuntó nos lo trajo mal, se lo dijimos y no hizo ni el amago de cambiarlo ya que había sido su error. El desayuno no estaba mal pero no volveremos.
Horrible! El peor restaurante al que he ido en años. Pedimos dos platos de huevos rotos con Secreto 'Ibérico' que costaron casi 20 euros cada uno y ahí el único secreto era saber de donde han sacado esa carne tan mala. Hay que tener mucha cara para comprar filetes de cerdo de los malos y hacerlo pasar por una carne que no es. También pedimos la ensalada de rúcula con queso de cabra, en la que la rúcula parecía estar un poco pasada de fecha. Le doy una estrella porque no puedo darle menos. Nada recomendable. No volveré nunca.
Una verguenza. 10€ por 8 albondigas se supone con tomate, pero era ketchup calentado. Una asquerosidad. Las canicas, porque de albóndigas no sombra, eran bolitas durísimas. Las patatas bravas eran las de microondas del Mercadona con el mismo ketchup caliente que las canicas. Lo mejor al salir a sido que había una farmacia cerca para poder comprar una caja de Almax para la acidez de estómago que nos ha dado esa asquerosidad de ketchup recalentado. Tanto cuesta para un restaurante triturar un tomate de 15 céntimos? Si tuvierais un poco de vergüenza tendríais que cerrar y parar de engañar a los ingenuos clientes que tomamos la mala decisión de fiarnos de lo que parece un restaurante. Lo dicho. Vergüenza.
Horrible. Patatas congeladas para unos huevos rotos. Un cachopo que no sé cómo tienen valor de llamarlo cachopo (tieso y más pequeño que mi mano). Carísimo para la porquería de comida que nos han puesto. De tener muy poca vergüenza. El camarero es agradable, pero se va a tener que buscar otro trabajo, porque un negocio así está condenado a fracasar.
Ha sido horrible, nunca volveremos. Nos fijamos en la carta y nos invita a entrar el dueño, le preguntamos si dentro habrá aire acondicionado y dice que si en 10 minutos, mentira!!! Terminamos y no salía frío de ningún lado. Las patatas congeladas, 5 boquerones en el plato de medio menú. Los macarrones sin tomate e insípidos sin nada de queso. Un desastre. Además el precio del menú carísimo por lo la calidad y cantidad. Se han cargado el sitio.
Restaurante con variedad de platos, pero sobre todo especialidad en la comida italiana. Trato muy amable y cercano. Muy buena calidad precio.