Restaurante sofisticado con carnes de categoría. Carnes de primera calidad y diferentes maduraciones, además de vinos españoles, en un restaurante con cocina abierta y terraza.
Uno de los mejores sitios de carne de calidad. Además de la alta calidad de la carne, es muy interesante como van variando cada cierto tiempo las piezas de las vitrinas de forma que puedes probar cada vez las novedades que van incorporando. Son todas de 10 así que elijas la que elijas no te equivocarás. El trato y la experiencia inmejorables. El precio es bastante alto pero al final estás pagando por todo lo descrito anteriormente, así que me parece que está bien para alguna ocasión especial. Volveré a repetir pronto ?
Una experiencia para probar desde luego. Una carne de calidad excepcional para los paladares más exquisitos. Pedimos un buen trozo de carne de buey ahumada durante 96 días en hornos especialmente diseñados para este proceso. Un sabor sin igual acompañado de productos de calidad. El trato de los camareros Julio y Nico, sin duda alguna, fue excelente y en todo momento nos hicieron sentir como reyes. Agradecer al personal y al restaurante el magnífico trato y el buen producto que nos hicieron vivir una experiencia maravillosa.
Siempre que quiero comer carne buena vengo a este restaurante, a mis padres les encanta . Muy buen servicio, el camarero es muy simpático. Carne de muy buena calidad, el precio es algo elevado pero merece la pena. La comida está toda riquísima, incluido los postres. Sin duda lo recomendaría
Ir a Meat Market es sentirte en casa, Julio Cesar es como el gran anfitrión que te acoge con los brazos abiertos. Una vez más no nos ha defraudado, producto fresco y de temporada para los entrantes, y una vaca madurada excepcional y en su punto justo. Hasta la patata que la guarnece está para hacerte llorar! Sin dudas repetiremos una y mil veces! A la próxima un cocido bueno de esos que preparan con tanto amor!
Buenísima experiencia. Trato profesional de 10, producto muy bueno y muy bien tratado. Opciones y variedad para quien no quiera carne. El chuleton de vaca vieja. ESPECTACULAR, la croqueta de vaca INSUPERABLE, el tuétano de escándalo. Todo perfecto. Además (me repito) del trato del personal del local. Si te gusta la buena carne no te lo puedes perder. Volveremos sin duda.
Una experiencia única en todos los sentidos, desde el buen trato de los camareros hasta la calidad de la comida. Cuando llegas te sirven un chupito de caldo que está increíble de sabor, luego te hacen una explicación de todos los tipos de carne que ofrecen, para posteriormente escoger tú el que quieras. Para entrantes escogimos el tomate rosa con encurtidos y las setas silvestres con huevo poché en aceite de trufa, este último venía acompañado de panecitos recién hechos. Los dos entrantes estaban espectaculares, porque se nota la calidad de la comida. Por último nos trajeron la carne acompañada de ensalada y dos patatas horneadas, nos explicaron como comerla y que cada dos o tres trozos, cogiésemos lechuga. Como conclusión, es un sitio muy bueno y recomendable.
Nos recomendaron el restaurante por ser uno de los mejores en el sector de carnes, la decoración es bastante agradable, cuando entramos nos ofrecieron un chupito de caldo de vaca vieja que nos encantó, después se acercó un camarero con un carrito que tiene cuatro vitrinas con carne y nos explicó cada una de ellas. La carne todo lo que la acompaña y el tartar de carne muy, muy bueno. No tenemos critica negativa, felicitar a todo el personal por la manera tan profesional de dar el servicio todo excelente. Es una experiencia que recomendamos sin duda. Pedimos recomendacion para un restaurante que se comiera bien pescado y nos recomendaron marisquería civera de donde hemos salido muy, muy contentos. Muchas gracias por todo. Sin duda alguna siempre os recomendaremos.
Meat Market es sinónimo de una nueva experiencia. Reserve con mi pareja para cenar en San Valentín y a pesar de llegar antes de la hora reservada nos atendieron muy agradablemente sin problema. Pedimos dos entrantes y una pieza de Frisona Alemana de 1,3kg atendiendo a recomendaciones. Los entrantes fueron un par de croquetas caseras de cocido y un tartar de vaca vieja. Todo un disfrute. Las croquetas eran generosamente grandes y al tartar le acompañaba pan recien tostado. La Frisona nos la presentaron en mesa sobre piedra caliente que mantuvo la carne el tiempo que duró, prolongando y manteniendo la experiencia. En cuanto a la carne, un escándalo. Nos recomendaron hacerla al punto de la casa y fue todo un acierto. Con la carne viene de acompañamiento unas patatas hechas en horno hosper, que también estaban buenísimas. Incluso nos indicaron que se podía pedir más patatas sin coste alguno. Tras terminar con la pieza de carne, nos ofrecieron también unos huevos con la grasa sobrante de la carne sin coste alguno. Todo un detalle de generosidad que no esperas al igual que las patatas. De postre, nos invitaron a un cheesecake para compartir y está tampoco defraudó. Buenísima. Y no por último, menos importante: El servicio fue muy agradable, atento y ágil entre plato y plato. ¡Gracias Nico, Tania y Julio Cesar! Sin dudas volveremos para repetir experiencia con amigos o familiares.