Local estilo taberna de mariscos españoles. Local antiguo y tranquilo con decoración rústica, en el que se sirven platos de mariscos españoles y jamón ibérico.
Restaurante situado a las afueras de Gijón con una carta extensa y comida asturiana de calidad. Raciones contundentes en su precio justo. Muy buena atención por parte de los camareros. Fuimos sin reserva y nos buscaron una mesa rápidamente. Merecen una gran reseña. Volveremos en otro viaje.
Empezaré reseñando que el servicio es excepcional, le voy a poner una nota de 11 pues son atentos, rápidos y muy profesionales. Los platos en general por lo que se puede ver son muy abundantes y de calidad. La tarta de la abuela, puro placer. Y el café pude tomármelo sin azúcar, que es lo que hago cuando está muy bueno. Muchas gracias.
Parece el típico restaurante de pueblo donde todo está bueno y es casero. Y así es. Lo que pedimos estaba buenísimo. El cachopo además de enorme está tierno y sabroso. El corte de la ternera excelente. Tienen menú pero pedimos de carta. Nos costó unos 34€ por persona ya que estamos 3 y pedimos todo lo que veis en las fotos más el postre. El servicio excelente Recomendado sin duda
Espectacular restaurante en pleno Gijón. Disfrutamos de una noche genial Gracias a la calidad de todos los platos y a la fantástica atención de todos los empleados. Nos pusimos hasta arriba: patatas cántales, garbanzos fritos (están de escándalo), almejas de carril, brocheta de rape y zambullías, el segundo mejor cachopo de España… Todo increíble. Destacar también el arte de todos los camareros escanciando sidra con una facilidad increíble.
Sidrería amplía que ofrece tanto menú del día como platos de la carta. El producto es excepcional y la preparación era más que correcta. Pedimos de entrante unas tostas de foie con jamón y cebolla caramelizada que estaban espectaculares. Y de principal solomillo de ternera con salsa de pimienta, buenísimo, el punto estaba perfecto, rubiel a la espalda, muy bien preparado y huevos rotos. Servicio correcto
Todo riquísimo y un trato genial de los camareros! Fuimos un martes a cenar y menos mal que hicimos reserva porque estaba a tope de gente. Recomendado!
Reservé con el tenedor porque era de los pocos sitios que aceptaba reservas "tarde" (a las 22:30). En una zona del comedor tienen escanciadores en la pared. Dejas tu vaso en el posavasos, le das a un botón y te tira del techo sidra escanciada. Espectacular. Éramos dos y no íbamos con mucha hambre, solo pedimos criollo y rodaballo, todo para compartir. El criollo muy rico, bien presentado, precortado. Con una salsa de especias que le iba muy bien, y con patatas (y solo 6 euros!). El rodaballo lo pedimos a la plancha de agua, que consiste en una plancha que tira vapor desde abajo para que el pescado no se seque. Muy rico todo y de calidad. Los camareros, muy majos, buen trato. Agradable y cercano sin excederse en las confianzas. Me sorprende la cantidad de mesas que atienden. Eso sí, debeis tener un poco de paciencia, estaban hasta arriba y la comida tardó un poco, desde luego no es el típico sitio al que iría con el tiempo justo. Si pides botella de sidra te la dan con rapón para escanciar. Salimos muy contentos. Como único defecto, por decir algo, sería un detalle que el chupito del final no lo cobraran (es una tonería pero es lo único un poco negativo que podría decir). Salimos muy contentos y sin dudarlo volveremos a repetir.
El cachopo con una calidad muy buena. Merece la pena pararse un poco alejados del centro para poder probarlo. Los camareros con una amabilidad y simpatía que se agradece. Hasta nos recomendaron qué visitar en Gijón y como hacer la mejor ruta por el centro! ? Volveremos seguro!!