Cocina malagueña y decoración innovadora. Amplio restaurante malagueño de estilo vanguardista con salones luminosos, barra de tapeo y acogedora terraza.
Un gran amigo reservo y nos llevo a comer allí, ya nos había hablado del lugar y que se comía muy bien. Y efectivamente, comimos muy bien, todo estaba buenísimo, la atención de los camareros excelente, y se estaba muy a gusto con el aire acondicionado. Una buena comida. Recomendado si pasáis por Málaga.
Local muy acogedor. Sirvieron rápido a pesar de haber mucha gente. Buenísima calidad de todos los platos y estupenda relación calidad / precio
Magnífica carta con los platos más típicos de la zona y variedades de carne para todos los gustos (y gastos). Equipo profesional y atención impecable.
Local muy bien situado junto a la catedral. Tiene terraza, amplio comedor y reservado. Amplia barra. Mesas amplias y cómodas, vestidas hasta el suelo. Buen tacto del mantel. Amplia carta de pescados, carnes y mariscos. Comida rica. La fritura variada no lo es tanto. El restaurante no es barato, todo tiene un precio.
Buen restaurante y comida excelente tiene terraza y salón dentro y el servicio muy bueno y Javier un encanto repetiremos
Fui a una cena de navidad de empresa y quedé gratamente sorprendido de que no nos dieran la bazofia habitual de estos eventos. El menú que habíamos elegido no era nada de otro mundo pero todo estaba muy rico. Plato de ibéricos generoso y con un queso buenísimo, ensaladilla para disfrutar, croquetas de jamón que merecían la pena, pescado frito perfecto y una presa ibérica jugosa y en su punto, de postre, milhojas perfecto. En fin todo muy bueno. Repetiré. Por cierto, servicio atento y amable.
Hicimos una comida de amigos, a través de una amiga que conocía el lugar. El trato increíble, la comida espectacular y el precio muy acorde a los tiempos que corren. La camarera Patricia súper encantadora. Repetimos seguro. Lo recomiendo al 100%.
Comida correcta en el centro de Málaga. Restaurante muy amplio no muy bien insonorizado. Dispone de múltiples salones que permiten mantener una buena distancia entre mesas. Comenzamos con una ensaladilla, nada especial. Las croquetas muy buenas, algo raro en esta tierra, ya que en la mayoría de los sitios suelen ser bastante "mazacote". Seguimos con unos boquerones, el pescado muy fresco y la fritura de 10. Para terminar un chateaubriand. Lo pedimos y aunque no estaba en la carta nos lo hicieron. Un buen detalle por parte de la casa. La carne excelente y la preparación muy buena aunque algo frío en su interior, posiblemente por el hecho de no estar en la carta. De postre un buen tocino de cielo. Un sitio al que se puede ir si estas por el centro de Málaga y seguro que sales satisfecho.