Restaurante informal con carne y pasta. Restaurante sin pretensiones con comida casera, como platos de pasta, carne, pescado y marisco.
Situado en la plaza de Santa Ana . Es un sitio ni grande ni pequeño, pero que está complementado con una terraza grande y con estufas . Por dentro esta muy bien decorado. La atención por parte de los camareros es buena . La comida está hecha con buenos productos, la presentación esta muy bien y la comida está rica ,pero no en exceso. Le falta un puntito. En general está bien
Un bonito sitio, con amplia terraza. Cenamos dentro.Fuimos de menos a más, según transcurría la velada. La comida muy buena y el camarero que nos atendió, Youssef, muy amable y atento. El precio, 40 € por persona.
Hicimos el desayuno en la terraza, llena a rebosar, en un principio temía que tardaran mucho en atender y servir pero han sido muy eficientes, el revuelto y la tostada con aguacate y huevo escaldado muy bien, quizás un poco menos de vinagre cuando escalden el huevo pero bien. Servicio atento y amigable.
No pongo 0 estrellas porque no se puede. Terrible experiencia. Hemos estado más de 4 horas consumiendo bebida y comida (cuenta de €100 al momento) y nos han echado porque quieren obligarnos a pedir un plato entrante por persona. Pésimo servicio que además se tarda un montón. Hay mesas a nuestro lado que solo tienen bebidas y no los han obligado a pedir más nada. Discriminación? No lo sé, pero no volveremos.
Saliendo un poco de la zona turística, se encuentra al límite de ser uno de ellos. Sin embargo ofrece una carta solida con platos españoles cuyos ingredientes son más que excepcionales
Pasábamos por la Plaza de Santa Ana y vimos la terraza de este restaurante y a un camarero sacando una hamburguesa. Pedimos una mesa y mi amigo eligió un cachopo y yo una hamburguesa de buey. Mientras esperábamos pedimos unas cervezas y unas croquetas que no eran nada especiales, las hemos tomado mucho mejores sin ir tan lejos en la terraza de enfrente, la vinoteca. Cuando trajeron el cachopo no era muy grande ya que estamos acostumbrados a tomarlos en Hermanos Ordaz pero el queso y la cebolla caramelizada le daban un plus y además no estaba nada aceitoso. La hamburguesa fue otra historia ya que la había pedido poco hecha y poco menos que me trajeron una suela de zapato muy hecha. A pesar de estar muy hecha el sabor de la carne era excelente aunque estaba muy seca. Le comenté a camarero que le había pedido poco hecha y ni pidió disculpas así que me tuve que comer. El picado de la carne excelente y el sabor del buey muy notable. Me gustan las hamburguesas y procuro pedirlas siempre que puedo. Lo que no nos ha gustado ha sido la atención ya que el camarero no resolvió el hecho de que la carne no estuviese como la pedí. El local muy bonito. El precio alto pero la zona se paga.
Muy buen servicio por parte de los camareros. Rapido y comida abundante y con mucho sabor. Nos regalaron los chupitos.
Tras haber consumido 4 horas, sobre las 21 (con una cuenta de 100 euros) pedimos un plato principal para compartir (y seguir consumiendo bebidas) y nos obligaron a pedir un plato por persona. El servicio, desde el inicio, dejó mucho que desear. Tardaban más de 20 minutos en entregar la las bebidas. Y al final, nos obligaban a pedir un plato principal por persona. Hemos decidido solicitar la cuenta e irnos. Hay muchos bares a los alrededores que valen la pena. Recomiendo que vayas a los otros.