Cocina vasca de temporada en un restaurante chic. Restaurante sofisticado de cocina vasca creativa con productos de temporada y proximidad, menú degustación y maridaje de vinos.
Desde la bienvenida hasta la espectacular tarta de queso fue toda una experiencia para repetir. Tienen un menú de degustación pero nosotras optamos por pedir algunos platos para compartir. Todo delicioso! Los camareros fueron súper lindos y atentos. Gracias a la chica de Colombia (perdona, no pude recortar tu nombre) por las buenas recomendaciones!
Me enamoré de este lugar sólo viendo la carta de vinos y la comida, llamé para reservar una mesa y nos dieron la mejor mesa del restaurante para contentarnos por nuestro viaje fallido. No pedimos el menú degustación , que tiene muy buena pinta por probar el rey, ¡qué pescado más rico y qué bien cocinado! Enhorabuena! Además, resaltar las verduras asadas, cocochas y pichón. Y no te puedes ir sin probar su tarta de queso idiazabal, ¡déjate un hueco! Ah, te ponen panes de diferentes sabores con 3 aceites diferentes . La atención del servicio amable y profesional. Gracias equipo, espero visitaros de nuevo
Anoche fuimos mi pareja y yo a cenar ya que nos habían regalado un menú degustación para dos. Cuando llegamos les dimos las hojas impresas de dicho menú que venían con código de verificación y nos invitaron a sentar. Vino un camarero y nos dijo si queríamos tomar algo y le dijimos dos vinos blancos, sin haberse dado cuenta de que nosotros ya teníamos lo de degustación. A continuación ya empezamos con el menú, nosotros queríamos hacer de la cena algo especial por lo que no sabíamos ni que venía con maridaje ni qué íbamos a comer. La cena estuvo increíble, fueron 9 platos y 9 copas. Cada plato superó al anterior, todo elaborado con mucha elegancia, fue una auténtica explosión de sabores y texturas. Nos encantó. Pero al irnos el camarero nos cobró los vinos del principio, vinos que nos puso por error sin informarse de que nuestro menú venía con degustación y maridaje. Por lo que la sensación del final fue rara por ese gesto tan feo, que es cobrarnos por los dos vinos cuando nos habían regalado los menús degustación.
Una opción muy segura y original para comer en Bilbao. Es el reino de las brasas y su aplicación a productos poco habituales. El equipo está muy comprometido e informan sin agobiar al cliente. Se echan en falta los aceites andaluces y la carta de postres es poco identificativa.
Maravilloso de principio a fin. El servicio excelente con un trato increíble, la comida exquisita, me gusto el detalle que tuvieron con nosotros de ponernos un dulce al final sin haberlo pedido de trufas con bizcocho, sin ninguna duda volveré pronto.
Un sitio increíble. Un rodaballo espectacular, unas anchoas buenísimas, vamos todo lo que probamos(hasta el pan y el aceite que te ponen para mojar) inmejorable. La atención de todo el personal muy buena. Lo pagas pero está muy bien.
Un restaurante de esos que no te deja indiferente, no solo cumple con las expectativas sino que las supera. Hemos comido el menú degustación de primavera para probar un poco de todo. Cada plato tenía su toque especial y todo muy bueno. El servicio muy atento y el tiempo de espera entre platos muy bien sincronizado. Personalmente recomiendo el menú degustación para comer, para la cena igual es demasiado, aunque si eres de buen comer, adelante.
Un sitio con mucho encanto y lujo. Los camareros muy atentos en todo momento y muy amables. Volveremos a repetir sin duda!