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Restaurante en el centro de Gasteiz. Tienen una carta con varios platos donde elegir y la verdad es que los que pedimos nos gustaron mucho. Como recomendación: Compartid los platos. Tienen una cocina pequeña y el restaurante no está pensado para que cada persona coma un segundo. Nosotros compartimos todo ya que queríamos probar varios platos, pero para que se tenga en cuenta El gran inconveniente que tiene es que NO SE PUEDE PAGAR CON TARJETA. Espero que en el futuro lo arreglen, pero a fecha de esta reseña NO es posible
Bonita decoración. Desayuno normal con tostada algo aceitosa. Lo peor, el servicio lento, al ser atendido por una mujer en barra que se encarga de todo, desde los cafés, las tostadas y hasta incluso cobrar. No aceptan pago con tarjeta pero dudo que haya un lavado de manos tras dar el cambio.. conviene reflexionar porque el local es bonito y llama la atención
Íbamos a tomar unos pintxos y unas bebidas pero el problema es que la camarera seguía el orden que quería al servir. Cuando varios clientes le avisan de que acaban de entrar y de que estamos nosotros antes, ella responde que le da igual y qje sigue su propio orden. Esperamos dos turnos más y le dice mi marido que quiere una cerveza y ella se gira sin esperar que sigamos con la comanda y se pone a servir a otros clientes que acababan de entrar y que le decían que no les tocaba a ellos. Su respuesta ha sido girarse y ponerse a hacer un café. Nula profesionalidad y sobre todo mucha mala educación.
Junto al hotel "NH Canciller Ayala Vitoria" se encuentra este bar que promete por sus pinchos y platos, pero es una decepción por la falta de profesionalidad, nula educación y mala atención del personal, además no utilizan datáfono. Eso sí, se aseguran de que consumas y después te informan que "no admiten tarjetas" y que te busques la vida, pero pagues en efectivo. Bar de barrio, no os lo recomiendo. ???????
Se come muy rico y la atención buena!
Somos clientes de este local de mucho tiempo y hemos observado desde hace un tiempo que ya no se puede recomendar este bar- restaurante. Han subido mucho los precios y el servicio no tiene nada que ver. Como ejemplo del aumento de precios un vino, un té y 2 pintxos 10 euros.
Local renovado, limpio donde puedes comer buenas raciones con música ambiental. Relación calidad-precio correcta, gama media. Comimos ración de pulpo gallega, soldados de pavía, croquetas caseras y ensalada de pimientos con ventresca, botella grande de agua, botella de vino moscato y dos cafés por 70€. Servicio bueno. Al dia siguiente desayunamos los 4, café y tostada con aceite y tomate por 13€.
Bonito, acogedor en un marco incomparable y cerca de todo. Para los de aquí o los de fuera merece darse un gusto. On egin..?