Café y bar de tapas español escondido. Restaurante y bar de tapas con una puerta discreta de madera y un interior rústico.
Perfecto, comida riquísima y calidad/precio estupendo. Lo que más nos gustó fue que pese a la alta afluencia de clientes, las camareras no perdían la simpatía y la amabilidad. Recomendable 100% Imprescindible pedir el queso frito y el polvito uruguayo.
Comida rica, lugar pequeño pero acogedor, precio bien unos 25 euros por cabeza por 4 platos, vino y postre. Pedimos jamón que nunca defrauda, champiñones con langostinos que estaban bastante sabrosos, bacalao al pilpil, aquí caimos un poco y entrecot que estaba medio hecho ósea, perfecto para nosotros. El servicio fue amable. El vino que pedimos fue un ribera del Duero cuyo nombre era tras las cuestas... Ahhh se me olvidaba, postres, tata de manzana muy buena pero el mejor, el browni:D
Pequeño establecimiento con una carta variada. El personal muy amable y la comida muy muy buena. Nos pusimos en manos la persona que nos atendió y acertó de pleno, cecina, queso frito con miel y el pato chumichurri para repetir. Los postres caseros y el brownie me gustó mucho. Es muy poca la capacidad por lo que os recomiendo reservar antes. Mesas altas con taburetes
Excelente, el servicio genial, la camarera muy agradable. Nos ha encantado todo lo que hemos comido. El Queso frito con mermelada de melón, buenísimo de los mejores. El Tarta de salmón excelente y el entrecot ídem. Los precios súper bien, es decir calidad-precio ?. Lo recomiendo al 100%.
Esta tasca es bastante pequeña pero muy acogedora. Te aconsejo que reserves para que no tengas que esperar fuera ya que es muy demandado. Como para no. El trato del personal es súper especial y están siempre muy atentos a todo. Hay una gran variedad de vinos, yo elegí tinto ya que iba a comer carne y hay que seguir con las tradiciones. La tabla de quesos que no falle, eso siempre hay que probarlo y ésta estaba buenísima. El risotto de setas frito nunca lo había probado, es más, me parecía hasta raro. Pero como no, un gran plato, su textura crujiente lo hacía diferente y al saborearlo te sentías como en la película de Ratattouille, una locura de sabores. El secreto era otro espectáculo y las croquetas de queso y manzana un 10, ese sabor de dulce y salado es un show. Todo iba acompaño de papas pajas. Quiero repetir pronto. ¡Muchísimas gracias!
Fui con unos amigos guiados por las buenas críticas y la verdad que no defraudó. La comida estaba riquísima. Nos gustó todo y la calidad/ precio merece la pena. El personal fue muy amable .Sin duda lo marcaré en la lista de restaurantes a los que hay que volver. Sí te gustó la reseña, dale a me gusta. Si quieres, tampoco te voy a obligar, jeje ?
Los platos varían y puedes elegir los que tienen escritos en la pizarra del comedor. Hemos pedido papas arrugás negras de Tenerife (muy bueno el mojo) y berenjenas fritas con guarapo (el guarapo es como miel de caña, y las berenjenas están súper crujientes y muy bien hechas). La camarera muy amable, lo único que no nos ha gustado es que no tiene buena ventilación y huele muy fuerte a comida. Buena relación calidad-precio
Suele decirse que "el buen perfume se vende en frascos pequeños"... Tasca pequeña, encantadora. De buen comer y buen beber, con cocina con productos elaborados y su personal con una atención excepcional. Consejo; Guarda sitio para el postre... 'Polvito Uruguayo'.