Recetas mediterráneas en las alturas. Platos mediterráneos en un exclusivo local con paredes de cristal ubicado en el piso 30 de un hotel de lujo.
Pedimos el menú degustación y no estaba nada mal, aunque me esperaba algo un poco más elaborado. El trato fue estupendo. Los camareros nos escucharon diciendo que estábamos celebrando un cumpleaños y nos trajeron un postre especial con velas de sorpresa. Salió completamente de ellos y fue un detallazo. Las vistas merecen la pena. Nosotros fuimos de noche, pero de día deben ser incluso mejores. El ambiente era muy tranquilo y la impresión general fue bastante buena. Recomiendo probarlo por la experiencia y el trato, pero no vayáis con las expectativas muy altas en cuanto a la comida, al menos si pedís el menú degustación.
La primera vez que he venido a esta restaurante,es limpio y grande muy tranquila. Nos ha entendido Maruam con mucho paciencia,hemos pedido comida ha nuestro gusto,el postre le pedi para cambiar,nos han cambiado y nos han traido un postre delicioso. Hemos pedido un menu,croqueta,bacalao,pulpo.Esta todo muy rico no me gusto mucho el bacalao,resto esta perfecto.
Las vistas no son tan espectaculares como me imaginada. La comida estaba muy buena pero era caro y el servicio un poco lento. Como experiencia estuvo bien pero no es para repetir.
Hemos reservado la noche romántica del hotel que incluye la cena en el restaurante. Resaltar las vistas. Hay que llegar antes de las 21:00 para coger mesa en las ventanas, aunque se ve bien en cualquier parte del salón. La comida muy rica, si tengo que destacar algo, me quedo con la croqueta del aperitivo, la crema de tomates y la corvina. Una buena atención atención.
Situado en el piso 30 de la Torre Pwc, en el hotel Eurostars. Entiendo que solo abierto, en la actualidad, para los clientes del hotel. Ofrecen un menú fijo, aceptable. Vistas diferentes, bonitas. Consejo: llegas 15’ antes de la apertura para asegurarte mesa con vistas.
⭐ Si estás buscando las mejores vistas de Madrid, el Restaurante Voltereta es el sitio ideal para vivir una experiencia inolvidable. Disfrutarás de una deliciosa comida mientras disfrutas de las impresionantes vistas de Madrid. El restaurante está situado en la última planta de un edificio, por lo que podrá admirar el paisaje urbano desde todos los ángulos. ❤ Es el lugar perfecto para llevar a un cliente o para una cita.
Experiencia única. Lugar precioso con unas vistas excepcionales de Madrid, sitio tranquilo, bien ambientado y muy buen servicio. Tomamos el menú degustación y era delicioso. La atención de los camareros impecable.
Fuimos a cenar, a destacar el ambiente era tranquilo, agradable y el trato y servicio excelente. No es un lugar bonito en cuanto a decoración, de hecho resulta muy sobrio y quizá algo anticuado pero las vistas son muy agradables. La puntuación se queda en 3/5 porque la comida no es lo espectacular que uno espera de un lugar así, está bien pero puedes comer mejor en sitios más normales. Pedimos el pulpo que estaba tierno, los ravioli de langosta cuyo sabor se perdía en la salsa pesto, y carnes que estaban muy buenas y tiernas, una de ellas en la que indican que va con boniato y ajo negro…no traten de encontrar el boniato, la otra acompañada de polenta, si polenta, no sé a quien le pareció buena idea. El precio de los platos es bastante razonable, la decepción llega en el vino donde los precios son ridículos, un Muga por 50€? Luis caña 45€? Desorbitado, más vale pagar los 80€ que piden por el Pago de carraovejas que al menos es buen vino. Conclusión: como experiencia está bien pero no para repetir y el vino pedidlo por copas, que no te lo indican pero tienen.