Restaurante Yandiola

Precioso restaurante con decoración exquisita, enmarcado en un sitio singular como es “La alhóndiga “ de Bilbao , la calidad de la comida es excepcional, con un producto de extraordinaria categoría , un placer para el paladar, los postres son maravillosos.

Es un restaurante para degustar; el trato del servicio es exquisito, te recomiendan cantidades y productos, muy atentos; leo comentarios que se quejan del precio; creo que es un precio correcto para los platos que ofrecen y el enclave en el que te los ofrecen; una terraza en la que está cuidado cada mínimo detalle. Dejo fotografías de los platos que degustamos; dos personas; comimos bien y no sobro nada

Sitio privilegiado en Bilbao donde se puede picar algo en su terraza disfrutando de un buen ambiente o comer los mejores platos de la cocina vasca

Fuimos un miércoles después de comer con idea de tomar unos cócteles y ver la Alhondiga desde arriba. El bar cuenta con una terraza muy agradable con mesas y una zona de sofás tipo chill out. Tienen una carta de cócteles bastante completa y el tipo que los prepara lo hace en tiempo récord (en apenas 3 minutos tenía los dos cócteles preparados). Pedimos un margarita y un mojito y los dos estaban muy bien hechos. El precio es caro (10€ por cóctel), pero acorde al sitio donde estás.

Como persona vegana invitada a un evento celebrado en su restaurante, debo indicarles que me siento indignada por el trato discriminatorio recibido en su restaurante. Les recuerdo/informo que el veganismo es un posicionamiento político que lucha por la liberación de los demás animales y que las personas veganas tienen las mismas necesidades nutricionales y el mismo apetito que las que no son veganas. Cuando a las personas no veganas se les ofrecen 6 platos y a las veganas 3 (uno de ellos reciclado del menú de las primeras) no se les está teniendo en cuenta como invitadas. Si ustedes creen que una persona puede saciarse y salir satisfecha tras un platito de gazpacho, 3 alcachofas y un minúsculo plato de risotto tienen un pensamiento completamente equivocado. Les recomiendo informarse/formarse en la elaboración de platos 100% vegetales y les recuerdo que las legumbres son además de exquisitas, un plato saciante y riquísimo en nutrientes. Si tienen esto en cuenta, seguro que ninguna persona con el mismo posicionamiento político se sentirá tan discriminada como yo al acudir como invitada a una celebración en su restaurante.

Ya no es lo que era. Conozco el Yandiola desde que estaba en el Campo Volantín; y desafortunadamente, su calidad y servicio ha caído en picado. Nos han dado de comer en la terraza con un pésimo servicio a precio de sala michellin. Hoy hemos pedido: Alcachofas con foie, las alacachofas eran de bote pasadas por la plancha y los doce taquitos de foie eran más pequeños que un dado de parchís = 23€ vergonzoso, Chipironcitos fritos con alioli suave, unas rabas poco frescas con un rebozado basto acompañadas de una mahonesa con poco ajo = 20 €, Paletilla de cordero a la brasa para dos, escasa ración de cordero pasado y seco con patatas recocidas = 48€, rodaballo, dudosa frescura, ración irrisoria y presentación lamentable = 29 € (era al peso y dudo que el peso correspondiera al precio pagado), Tarta de manzana fina, un pésimo hojaldre seco cubierto de una finísima capa de manzana con helado = 9€, agua KM0 (del grifo) = 3€ botella. La cuenta, con cafés incluídos han sido 149,25€, un precio que no me importa pagar cuando la ejecución y calidad de los platos está a su altura. Es una pena ver cómo buenos restaurantes de Bilbao abandonan su bienhacer, no creo que en un restaurante de este calibre se puedan permitir sacar estos platos a estos precios. En cuanto al servicio, prefiero no comentar.

La carta justa, precisa y variada, tomamos el menú degustación, que nos pareció una buena opción y relación calidad- precio. A destacar: el salmón ahumado, el solomillo y el postre de cacao. Servicio muy cercano y amable. Me gustó especialmente la sala, muy cuidada la decoración y la iluminación. Buen ambiente.

Es esta ocasión se esta dando de comer en la terraza. La experiencia fue genial, la comida rica y de calidad. El servicio inmejorable, atentos y agradables. Buen lugar para compartir y disfrutar de las vistas que ofrece la terraza. Variedad de cócteles y bien elaborados.