Taburetes bajos y pintxos tradicionales. Restaurante informal con taburetes bajos de madera y una extensa barra de pintxos tradicionales y creativos.
Hemos comido fenomenal, los camareros muy agradables y serviciales. La comida rica aunque el solomillo estaba un pelín seco. La única pega es que hacía frío en el local.
Agradable establecimiento. Personal muy atento, amable y eficaz. Pintxos y carta. Platos abundantes, sabrosos y bien presentados. Conviene dejarse aconsejar
Trato muy agradable y de buen consejo sobre la cantidad. La xomida con buen aspecto pero los hechos no lo fueron tanto, parecía hecho con prisa (que corrobora la rapidez con la que se nos sirvió). Los puerros un poco duros y pasados de hacer, y el cachopo estaba muy bueno pero muy poco ligado. Eso sí, dejaos aconsejar por el postre típico porque es de 10. Local clásico y agradable. Probablemente le demos otra oportunidad pero en esta ocasión la valoración es sólo de 3 estrellas.
Al personal le damos un 5/5!! Entregados y serviciales explicando sus platos y su historia. La comida, para nuestro gusto, con falta de sal. Eso sí, su postre típico, muy rico.
Que gozada!!! Viendo las reseñas por internet, para la primera cena en Vitoria elegí esta taberna. Que gran elección!! Había reservado mesa hacía unos días y ya nos tenían la mesa preparada. Nos atendió primero el camarero que nos indicó nuestra mesa, y nos trajo la carta. Luego fue el turno de Jon el cocinero que nos vino a tomar nota, lo que elegimos (eramos 3) fue una tosta de ibérico con gorgonzola, surtido de fritos, chipirones Plentzia, ensalada chipirones y un chuletón a la vasca. Pero que chuletón, estaba de muerte. Jon no se creía que podría con la ensalada de chipirones de un muy buen tamaño y luego con el chuletón… un señor chuletón… pero cumplí con creces… y repito el chuletón estaba de muerte. En conclusión una gran elección y una comida excelente. Un placer empezar así las vacaciones en Vitoria-Gasteiz. Mil gracias Jon!!
Venimos a pasar unos días por Vitoria y el primer día tuvimos la buena decisión de entrar a este local , probamos bastantes cosas desde las albóndigas de ciervo , un bacalao que presentaban sobre una concha de zamburiña y varias cosas más hasta el postre típico de ahí .. todo espectacular , también ofrecen platos por menos de 10 euros y por lo que vi son bastante contundentes , el chico que nos atendió muy simpático y paciente explicándonos cada tapa , el precio muy bueno para la calidad superior del plato , es económico y varias opciones. 100% recomendable
La comida excepcional, a muy buen precio y unas raciones enormes. Los camareros muy atentos. Te hace sentir como en casa.
El mejor restaurante. Trato de Jon increíble. Comida inmejorable por precio muy correcto. Codillo y pencas buenísimas.