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Estupenda terraza en el centro de Valladolid. Ideal para tomar un vino (se puede pedir por frascas y es muy económico) y picar algo. Todo lo que he probado delicioso. Personal encantador. Muy recomendable.
Es el local sin local. Sólo tiene terraza. Buen ambiente, buen vino pero flaquea en la comida, desde mi punto de vista. La tabla de quesos bastante bien, muy cuidada la presentación. Las patatas guisadas bravas muy flojas y la tosta de atún, el pescado crudo (no lo indican en la carta, algo que me parece muy mal). Para tomar un vino o cualquier otra cosa, bien. Para comer, yo no iría, pero para gustos.......
Gran atención por parte de las camareras. Estupenda ubicación. Dispone de una acogedora terraza. Todo lo que pedimos me gustó, las bravas, las aracinas y las palomitas.
Lamentablemente tengo que bajar mi valoración. La nueva carta es absurdamente cara y las tapas son malas. El cazón resultó ser una ración que salía a euro la pieza (8 euros en total) y era terriblemente malo. El guacamole era carísimo (8 euros por 10 totopos con un poquito de guacamole industrial). Lo mejor siguen siendo las palomitas (3.5 euros, un euro más que hace una semana) y el servicio, que sigue siendo muy amable y profesional. No sé cuál es la intención del dueño del negocio con el cambio, pero la inflación no justifica ni esos precios ni esa calidad
Que buena gente y que buenas vistas, gracias SARA por ser tan cercana y atendernos tan bien volveremos pronto ?? por cierto las cañas y los perritos criollos os los recomendamos
Su localización es privilegiada en una animadísima calle para tapear, y tomar algo de manera informal, divertida y muy agradable. La cocina está bien sin más.
Sitio nuevo y con comida original que merece una parada frente a la Catedral!! Con ganas de repetir! Recomendable 100% el perrito y los croissants?
Platos originales, con gran variedad sin gluten y una calidad de 10! La atención por parte de Manu y Lucía fue inmejorable. Un sitio nuevo, moderno con unas vistas espectaculares!